domingo, 29 de diciembre de 2013

LA ESPIRAL 2

Aquella persona que siempre está sintonizada, conectada con la naturaleza no se pone triste, desesperada. La vibración, la función de la persona ligada con la naturaleza es muy conmovedora, entusiasta. Por eso digo siempre que debemos sentir, como mínimo, tres conmociones por día: inmediatamente después de levantarnos sentimos la primera, con el nacimiento del sol y la vibración de la naturaleza que nos llega a través de sus mensajeros, los pájaros. Las otras dos conmociones están relacionadas respectivamente con la alimentación y el sueño. Esta vibración relacionada con la existencia no deja que la persona se quede inactiva. Esta ligazón depende de la sensibilidad de cada uno. El problema es, básicamente, la sensibilidad instintiva, que está ligada con la naturaleza.(...)

Desde pequeño siempre saludaba a los representantes y mensajeros de la Naturaleza –las hormiguitas, las abejas, las lombrices, los sapitos, los innumerables insectos- que existen abundantemente en los campos, en los árboles, en el aire. Todos son ejemplos de función espiralada. Todo es espiral. Esto es algo conmovedor, lleno de entusiasmo.


Existe un insecto de cuatro alas llamado libélula; los hay de varios colores; rojo, marrón… Este animalito tiene los ojos grandes, colita y le gusta permanecer sobre el agua, estático en el aire. Para los niños es una diversión agarrarlo. Yo era pequeño pero ya conocía el secreto para capturarlo. Instintivamente, todos los niños de Japón conocen el secreto para coger este insecto. La libélula, cuando vuela, se aleja de uno. Ella tiene sensibilidad pero nosotros no la dejábamos escapar. ¿Qué hacíamos? Nos parábamos frente a la libélula y hacíamos un movimiento en espiral con el dedo índice. ¡el resultado era increíble! La libélula se quedaba parada, hipnotizada, y nosotros la agarrábamos. Ésta es una función espiralada muy divertida y maravillosa. Con las personas ocurre lo mismo. Ésta es una aplicación de la función hipnótica.

En Goiás, los cazadores hacen lo mismo con la perdiz que vive en el campo. El cazador encuentra a la perdiz en el campo, sola, y comienza a caminar alrededor, cerrando la espiral. La perdiz sigue caminando, observando, mientras el cazador va cerrando el círculo con paciencia hasta que llega muy cerca de ella y la coge. La perdiz a quedado aturdida. Éste es un ejemplo de desequilibrio, de movimiento penetrante.

El movimiento en espiral también desequilibra la función básica de nuestro organismo, que es la función nerviosa. Para acelerar el efecto de la hipnosis, se hace movimiento circular. Yo ya he confirmado la función práctica, el efecto maravilloso de la hipnosis. Nadie resiste al movimiento en espiral que se realice en frente de uno. Éste penetra como broca en la madera.

La obra maestra del desequilibrio es la espiral, sin la cual no sería posible la evolución:

La vibración de la luz también va en forma espiral. Todo es espiralado.

El movimiento en espiral es una palanca espiralada. Usted puede relacionar este movimiento con el trabajo de la broca. La broca perfora cualquier cosa al penetrar con un movimiento desequilibrado. La broca es un ejemplo de la potencia del desequilibrio. Todo lo que existe esta formado a partir de la función espiralada. El gato, por ejemplo. No estoy hablando del animal “gato”, aunque el también, si lo analizamos, tiene función espiralada. Estoy hablando del gato mecánico, que levanta cosas pesadas, por ejemplo un camión de muchas toneladas. El gato es una aplicación impresionante de la fuerza espiralada. No es necesario usar fuerza: sólo hay que girar el eje labrado en espiral y el gato levanta cualquier cosa por pesada que sea. Si el eje del gato no tuviera forma espiral, sí éste simplemente rodara en el mismo lugar, circularmente, no funcionaría.

La forma/función espiralada es rotatividad desequilibrada. La obra maestra del desequilibrio,de la rotatividad, es la espiral, sin la cual sería imposible encontrar la consecuencia, la influencia, la utilidad evolucionaria.

Todos usan la palanca pero no perciben lo que está ocurriendo. Sin embargo, gracias a Arquímedes, nosotros podemos reconocer el valor de la palanca. Arquímedes fue quien descubrió la función maravillosa de la palanca. La palanca es una cosa muy simple, la Naturaleza es muy simple.

Entonces necesitamos reconocer la maravilla de la espiralidad que, cuando se desarrolla en el campo cerebral, es llamada espiritualidad.

Para penetrar las palabras tienen que estar antagónicamente desequilibradas:

La espiritualidad fue sobrevalorada, mistificada y, de modo imaginario, considerara mucho más importante que la fuerza material. No existe función espiritual sin relación, sin integración con el campo material. La mente y el cuerpo tienen que estar ligados por una función espiralada.

Sin embargo, por sí sola, la espiralidad verbal puede influir, penetrar, como si fuese una broca. Es el caso de las palabras usadas por los líderes con carisma. Sin saber, sin percibir, sin querer, la mayoría de esos líderes usan palabras dinámicas, que son aquellas que se relacionan antagónicamente. Si se utilizan solamente sinónimos, la fuerza verbal no penetra. Para penetrar, las palabras tienen que estar antagónicamente desequilibradas. Por fortuna, las palabras tienen dos lados: sinónimo y antónimo. El antónimo esta relacionado con el “no”, y el sinónimo con el “si”. Tenemos que utilizar la palabra antagónicamente interconectada, desequilibradamente equilibrada. Es el desequilibrio espiralado el que hace que nuestra mente se “mueva”. Es desequilibrio es sinónimo de caos. Para bien nuestro, el sistema moderno está volviéndose cada vez más caótico, desequilibrado; para mal nuestro, la mayoría de las personas está absorbida por el sistema.

¿Cómo funciona el huracán? El huracán es un movimiento en espiral. No es simplemente circular, no permanece en el mismo lugar; su movimiento es progresivo, evolutivo. El movimiento evolucionario es un movimiento espiralado. Es necesario confirmar esta maravilla de la espiralidad, que incluso evolucionó hasta la espiritualidad.

Todo existe en sintonía con la enorme potencia de la fuerza espiralada de la Naturaleza:

¿Cómo terminó la torre de babel? Quiero ir hasta la región de la antigua babilonia para confirmar lo que realmente ocurrió con aquella obra tan bien construida. En babilonia existen muchos registros interesantes, inclusive mitológicos. ¿Qué acabó con aquella construcción? Pienso que fue un gran huracán el que la destruyó. Ninguna construcción, por grande que sea, puede resistir la furia de un huracán.

El huracán no es simplemente una tempestad. La  fuerza sola del viento derriba muchas cosas, pero el movimiento en espiral arranca incluso árboles. El huracán no solamente derriba: arranca los árboles por la raíz y los lleva por el aire. Este es un ejemplo importante de la función espiral.

Todo esta hecho con espiralidad todas las personas tienen una marca espiral en el centro de la cabeza. Existen personas que tienen hasta dos y hasta tres (estas personas son confusas). Otras tienen la espiral fuera de lugar ¿Porqué existe esa espiral en el centro de nuestras cabezas? La espiral es una marca maravillosa de la historia, que, desde el útero, determina nuestra posibilidad evolutiva. Todo esta sintonizado con la enorme potencia de la fuerza en espiral de la Naturaleza.

Existen varios ejemplos. El Aikido es, típicamente, un entrenamiento de movimiento en espiral. No es de movimientos redondos únicamente: es desequilibrado. Cuando el adversario ataca, la persona que practica Aikido ni siquiera reacciona: simplemente recibe el golpe, pues no sirve escapar. La persona sólo tiene que acompañar, bailar con el adversario. El Aikido es un baile en el cual no se debe usar fuerza ni hacer ruido (la persona a la cual le gusta hacer ruido al caer cuando practica Aikido, es infantil. Aquel que practica un Aikido más relacionado con la tranquilidad de la naturaleza no hace ruido). Todos los movimientos fluyen, ligados entre sí. Este es un entrenamiento de la flexibilidad, de la espiralidad.

En la realidad no existe ninguna cosa redonda:

El hilo que nosotros usamos para coser tiene forma de espiral. Si no estuviera retorcido, el hilo no tendría resistencia. Yo estuve en una fábrica de hilo de algodón y pude comprobar que las fibras que forman el hilo son retorcidas en forma de espiral y no simplemente juntadas.

Nuestros músculos también están hechos de fibras enrolladas, pero no enrolladas en el mismo lugar, sino siempre en forma de espiral. Con los cables de las líneas eléctricas ocurre lo mismo.

La realidad natural, normal, ordinaria, simple, tiene forma de espiral. Es fácil confirmar esta maravilla de la Naturaleza. Si analizamos la estructura muscular del corazón, vemos que no es simplemente tejido muscular unido horizontal y verticalmente. La estructura del músculo está siempre cubierta con una forma espiralada desequilibrada. Ni siquiera la forma del corazón es redonda. Las personas idealistas, perfeccionistas, idiotas, monomaníacas, megalomaníacas son admiradoras incondicionales de la forma redonda, que ellas consideran la forma perfecta, más plena. Por esta razón, es posible que ellas se sientan extrañadas de que el corazón no sea redondo.

Hipotéticamente, lo redondo es lo más equilibrado, lo más armonioso, pero en la realidad no existe ninguna cosa redonda. Esta es una confirmación fundamental: no existe ninguna cosa equilibrada, ni siquiera desde el punto de vista formal. La forma y la función son simultáneas. Naturalmente, normalmente, no existe ninguna cosa equilibrada. Existen cosas artificiales que parecen redondas, como la bola de ping-pong. No obstante, ellas sólo parecen ser redondas pero en realidad no lo son totalmente. Si se analiza en detalle confirmamos que es imposible hacer una cosa muy redonda; casi redondo quizás, pero no perfectamente redondo.

Las personas que trabajan con la forma, los artistas, confirman esto fácilmente, por ejemplo Miguel Ángel. Él era muy respetado y, por esta razón, siempre tenía oportunidad de ver al papa Inocencio, que recibía a los grandes artistas de la época. El artista está relacionado con la vibración formal, con el perfeccionamiento estético de las formas, bien sea en pintura, escultura, literatura, música. El papa le preguntó: “Miguel Ángel: usted que es un gran artista, dígame cual es la forma que le cuesta más trabajo dibujar”. Él contestó: “la forma redonda”. Si se analiza al microscopio, se puede ver que no existe lo redondo perfecto.

La forma casi redonda no evoluciona, no tiene flexibilidad:

 Lo que es desequilibrado tiene potencia. Lo que no se desequilibra no tiene función potente. El corazón mismo es potente porque es desequilibrado. Lo mismo ocurre con el huevo y las semillas. ¿Por qué las semillas tienen fuerza enorme para multiplicarse? Porque no existe ninguna semilla redonda. Algunas parecen redondas pero en verdad son siempre desequilibradas. Aparentemente son redondas, pero la relación entre la parte que tiene el germen y la que tiene el almidón es desequilibrada. Las partes de la semilla no están uniformemente distribuidas. Existe la parte principal y la parte complementaria. La semilla es una palanca. En esto se ve una evolución progresiva.

El huevo mismo no es redondo. ¿Por qué no duda entonces el perfeccionista y se pregunta: ¿porqué el huevo no es redondo? Para el perfeccionista, el huevo debería ser muy equilibrado, armonioso, redondo, porque lo redondo es la forma más perfecta, más plena, ideal, más equilibrada. Los perfeccionistas no entienden este ejemplo simple de la naturaleza, que les está mostrando que no existe nada armonioso, equilibrado. Ni la semilla. Ni el huevo. El huevo es siempre ovalado. ¡Como es de maravillosa la naturaleza: ella no deja que se forme un huevo redondo, como la pelota de ping-pong!

Lo perfectamente redondo constituye una forma peligrosa. Si el huevo fuera redondo, rodaría mucho más fácil. Pero gracias a la maravilla del desequilibrio, el huevo, aunque ruede, tiende a parar, porque no es redondo. Este es un ejemplo simple de la importancia del desequilibrio, aunque muy significativo.



Fuente:“Naturaleza mucho más poderosa que Dios”

Tomio Kikuchi