domingo, 3 de octubre de 2021

Sanar

 


"¿Qué gano estando enfermo?"  Esta es una pregunta que necesitas hacerte sinceramente, en la tranquilidad. Es una pregunta que necesitas hacerte sinceramente si lo que deseas es sanar. "¿Qué gano estando enfermo?"

Quizás crees que hay algo externo a ti que puede cambiar si le muestras debilidad. Quizás sientes culpa por algo y crees que 'mereces' lo que te sucede, quizás sea tu manera de demostrar que estás ahí y que necesitas amor, hay un sin fin de quizás y todos ellos están basados en la creencia de que hay algo externo a ti. Están basados en la creencia de que eres un ser separado de los demás seres, de que eres un individuo distinto a cualquier otro ser de este planeta.

Ahora plantéate tu vida desde otra perspectiva. Eres un Ser Único, todo lo que tú crees separado de ti es tu mismo Ser. Tu Ser es Espíritu,  no tiene cuerpo físico. Todo lo que ves en tu mundo son fragmentos de tu Ser. Tu Ser representa el papel de cada uno de estos fragmentos para ti con una única finalidad, que lo reconozcas a Él. No necesitas verlo con tus ojos físicos sino con tu Corazón.

"Dichosos los que creen sin haber visto" Jn 20,3

Tu Ser es Uno con la Fuente de Amor. El Amor es Uno, es indivisible. Todo lo que existe es Espíritu,  tu Poder es Ilimitado y lo único que te sucede es que crees ser lo que no eres. Es un error de percepción, nada más. No es momento de preguntarse ¿Porqué?  Todas las respuestas llegarán cuando recuerdes. Es momento de que te plantees quién quieres creer ser, qué prefieres creer. 

Ahora bien, la pregunta que planteé al principio es clave. ¿Qué ganas estando enfermo? Si crees ser un individuo diferente a los demás, hay algo que crees que ganas estando enfermo. Si en cambio prefieres creer en tu Ser, concluirás que no ganas nada con ello. No demuestras nada a nadie, no te culpas de nada, no necesitas nada porque ¿a quién sino a ti mismo le estás haciendo esto? Fue tu decisión estar enfermo,  pero estabas equivocado.  ¡Creías ser quien no eras! Pero ahora decides de nuevo, eliges creer en tu Ser Perfecto, pleno de Amor y Eterno. Tu Ser Perfecto es Felicidad y no dolor.  Y no sólo eso, ahora tu propósito es otro, en vez de demostrarle algo a alguien o a ti mismo, ahora tu propósito es recordar Quién Eres. 

La sanación es una decisión, una decisión que más firme se hace en ti cuando encuentras tu verdadero Propósito. Recordar tu Ser. El camino más seguro para ello es el servicio, servir a tu Ser. Es contemplar tu Ser, cada fragmento que percibas, desde el Amor. Reconociéndolo. Es ser amistoso con todos,  sobre todo con aquellos que más lo necesitan, tú precisas recordar y sólo dando tu Corazón a los demás podrás verte en ellos. Más das, más recuerdas. Más das, más feliz eres.

Plantéate que eres un inmenso Sol y que allá donde vas tus rayos acarician todo al pasar. Cada uno de tus rayos lleva en sí la chispa del recuerdo, aquel que sea tocado por ellos recordará y alejará de sí las nubes que le impedían ver el Sol. No esperes inmediatez, el ego usa el tiempo para que no veas resultados, confía tan solo en este Sol que Eres. Lo que das a los demás en verdad lo recibes tú,  cada fragmento que percibes que no recuerda Quién Es necesita de tu Luz. Eres tú quien no recuerda Quién Eres por eso lo ves en los demás, pero al iluminar tu camino iluminas tu recuerdo de La Luz.

No necesitas ir a ninguna parte para servir, aunque si ese es tu deseo todo se te facilitará. No necesitas moverte porque no olvides que no eres este cuerpo,  el Sol que Eres acaricia con el pensamiento, alejando suavemente, de todo fragmento, las nubes que impiden ver esta Luz. No necesitas convencer con tus palabras, simplemente da tu amor, da tu amistad, entrega tu Corazón, estos son los Rayos que todo fragmento necesita recibir. Sin excepción.

Si sigues Mi consejo más y más llegarán a ti las pruebas de que estás haciendo lo correcto. Sanar no es el objetivo, ya estás sano, el objetivo es dar para recibir lo que aún no crees te pertenece. Aún no crees en tu perfecta salud. Necesitas dar lo que en verdad Eres para Ser. Así es como recuerdas. Da pues, amor, alegría, bondad, generosidad. Cuando das lo que no eres,  sólo refuerzas el error de creer ser un ser débil y limitado. Confía en aquello que aún no ves pero que sientes está en ti, confía en el Amor.

"La base fundamental de la curación es la aceptación del hecho de que la enfermedad es una decisión que la mente ha tomado a fin de lograr un propósito para el cual se vale del cuerpo. Y esto es cierto con respecto a cualquier clase de curación. El paciente que acepta esto se recupera. Si se decide en contra de la recuperación, no sanará. ¿Quién es el médico entonces? La mente del propio paciente. El resultado acabará siendo el que él decida. Agentes especiales parecen atenderle, sin embargo, no hacen otra cosa que dar forma a su elección. Los escoge con vistas a darle forma tangible a sus deseos. Y eso es lo único que hacen. En realidad, no son necesarios en absoluto. El paciente podría sencillamente levantarse sin su ayuda y decir: "No tengo ninguna necesidad de esto". No hay ninguna forma de enfermedad que no se curase de inmediato." MdM

Los Pacificadores