miércoles, 14 de agosto de 2013

FOCO TONAL 1: CENTRO DE ENERGÍA CÓSMICA






Pocas personas saben que hay un lugar especial en Cuitzeo antes de llegar a Ocotlán, Municipio de Poncitlán, Jalisco, que atrae a cientos de personas en busca de ayuda y curaciónEste lugar fue identificado como un lugar de poder por un curandero, clarividente de Reynosa, Tamaulipas. 

Para conocer su historia hay que remontarse a 1998. Por aquel año, un habitante del pueblo de Ocotlán, Javier Salcedo Arévalo, se encontraba totalmente desahuciado por la medicina tradicional. Los médicos le habían informado de que debían amputarle una de sus piernas. Entonces, una enfermera del hospital le habló de un hombre, le recomendó que buscase a esta persona que, utilizando métodos diferentes a la medicina convencional, tal vez podría curarle. Javier tuvo un encuentro con el sanador Don José Sebastián Zamora. Entró en la consulta con muletas y, milagrosamente, salió andando sin necesidad de usarlas. Cuando regresó a Ocotlán le comentó lo sucedido a su amigo y vecino Don Manuel Domínguez, que propietario de un castillo en ese lugar, por aquel entonces en construcción. Domínguez se quedó impresionado al escuchar su historia y le comentó que deseaba conocer al sanador e invitarle a su castillo cuando este visitase Ocotlán. Y así ocurrió.

Javier lo invitó a visitar Ocotlán y cuando Manuel Domínguez supo de su llegada, queriendo conocer a Don José, lo invitó a su casa del castillo de fantasía, con sus torres y gárgolas dragón, que estaba construyendo junto al lago de Chapala. 
“El sanador Don José Sebastián me dijo que ya había visitado mi castillo en tres ocasiones, a través de viajes astrales  pero que, al no conocer el territorio, no podría ubicarlo en un punto exacto. Me describió el lugar fielmente antes de verlo físicamente. Según me dijo, ésta era la zona que tanto tiempo llevaba buscando” - explicó Dominguez-.
Cuando Don José entró en la casa y se dirigió a los jardines, reconoció el lugar como el lugar de poder que había visitado espiritualmente y encontró un área con dos vórtices de energía una que provenía de la Tierra e iba hacia arriba  y otra proveniente del cielo e iba hacia abajo y marcó el lugar con su bastón.


Tras este encuentro que causó una honda impresión en Don Manuel, pasaron dos años hasta que volvieron a verse. En esta ocasión, José le comunicó al dueño del enclave una noticia inesperada: en su parcela confluía un punto energético muy potente, indicándole su ubicación exacta.
“La energía que aquí confluye –comenta Don Manuel- está en constante circulación. Da la vuelta a la Tierra y vuelve a este punto de nuevo. Todas aquellas personas que venían invitadas a mi hogar declaraban que respiraban una paz y una tranquilidad muy especial."
Domínguez estaba intrigado con el hallazgo de Don José,  creía en la importancia cósmica del lugar... En cualquier caso, se decidió la construcción de  un "templo" al aire libre en todo el lugar identificado por Don José y éste pidió a Domínguez que construyera una estructura parecida a una piscina circular poco profunda rodeada de siete columnas de diferentes colores. Cuando la construcción estaba al 60 por ciento surgió de ésta un eco increíble lo que confirmó a Don José que era un lugar Sagrado. El eco aún se escucha cuando los visitantes dicen su verdadero nombre en una marca dentro del círculo. 
"Don José experimentó ese eco y tras un mes de oración, se le dijo que Saint Germain, un maestro ascendido,  había pedido ser el protector de Foco Tonal" explicó Domínguez. 
"Foco" significa foco o centro. La palabra "tonal", puede estar relacionado con la palabra náhuatl (azteca) 'tonalli ", que se refiere al alma o espíritu. El sustantivo tonalli, deriva del verbo tona, "irradiar". Muy significativo es que el vocablo tonalli consigna el simbolismo solar...

"El tonalli marcaba un vínculo personal con el mundo de los dioses. Señalan este vínculo en "forma material, aunque invisible, como un hilo que salía de la cabeza del individuo" (López Austin, 1980, pp. 238-239).
Don José llamó al lugar "Foco Tonal", y luego añadió: "Esta era mi misión. Todo se ha cumplido ". Foco Tonal se completó a finales de 1998, unos cinco meses después Don José murió tranquilamente en su cama. Ahora Domínguez llama el lugar "una herencia para el mundo",  muchas curaciones tienen lugar allí, como Don José previó. 

Ahora bien, ¿qué ocurre en el interior de este círculo rodeado por siete columnas de diversos colores, justo cuando una persona pisa el centro donde se encuentra una estrella de siete picos? Un curioso efecto sonoro, ya que las voces parece que tienen “eco”. Incluso es tal esta sensación de las voces como si estuvieran atrapadas en un tubo (o un cántaro), que el fenómeno se vuelve por demás interesante, ya que está al aire libre y no existen paredes para que el sonido adquiera dicha sensación “cavernosa”. Pero lo más curioso es el hecho de que la única persona capaz de escucharlo sea justamente la que se posiciona en ese punto central. Es decir, que alguien que se encuentra a tan sólo un metro, será incapaz de escuchar los sonidos reverberantes que provoca la persona situada en el céntrico punto. ¿A qué se debe esto? Según nos cuenta Don Manuel, nos encontramos ante un CENTRO DE ENERGÍA CÓSMICA. Es una puerta hacia otros mundos, el paso a otra realidad, de ahí que seamos capaces de sentir el extraño fenómeno del sonido. 
“Es un punto en el que establecemos un contacto directo con la Divinidad, la entrada hacia otra Dimensión. Todo lo que pidamos coherentemente se nos dará, ya que la comunicación es inmediata” declara Don Manuel.
Las siete columnas tienen también su importancia, cada una de alrededor tres metros de altura, que rodean el circulo, de diferentes colores algunos muy vivos. Los colores se asocian con los valores humanos universales: rosa para el amor, amarillo de la sabiduría, verde para la vida, la salud y la fertilidad, el oro de la prosperidad, púrpura de trascendencia, azul para la protección, y el blanco de la paz. La tradición asociada con las columnas es rodear con los brazos alrededor de uno de ellos, para "darle un abrazo", impregnándose así mismo con la energía, o propiedades, de la columna. En cambio la "piscina", está construida con infinidad de azulejos grises y blancos que indican la vorágine de las energías cósmicas y su centro, en el que Don José había colocado su bastón, hay un círculo en el azulejo y el dibujo de una estrella de siete puntas.

La mecánica del lugar es sencilla: tras el respectivo pago de quince pesos, uno espera el turno para ingresar al círculo en un grupo de alrededor 20 personas. Antes de hacerlo deben quitarse el calzado. Después, se sientan en la circunferencia y Manuel los invita a que, uno por uno, se levanten y se paren al centro para decir su nombre. De ahí en adelante, se hacen las peticiones personales o se agradecen los “regalos” que se obtuvieron de solicitudes pasadas.

Transcurridos diez minutos, la actividad termina y tal vez todo el grupo se pare al centro y levante una oración, ya que como muchos asistentes comentan “la comunicación con el Creador es directa”. Pero ¿cuáles sensaciones se perciben dentro del círculo? La respuesta es variable pero se descubre una tranquilidad casi palpable, de fuerte presencia que acapara todos los sentidos. Algunos visitantes al salir del círculo sienten mareos y se les nubla la vista. Otros dicen ver extraños círculos de energía blancos (orbs), mientras que los restantes afirmar que “se llenaron” de buenas vibraciones.
“De hecho, la propia creación y adecuación del lugar es ya de por sí un milagro. Justo después de saber lo que debíamos hacer en este punto, necesitábamos dinero porque nuestra situación económica no era buena. Se lo pedimos a Dios y al poco tiempo nos tocó un coche en un sorteo. Lo vendimos y con el dinero pudimos ir saliendo de los apuros. En 2001, volvimos a pedirle que nos ayudase con “algo” para proseguir con la construcción y nos volvió a tocar otro coche que pudimos vender para continuar con nuestra labor”, comenta Don Manuel. 
El propietario también es de los que defiende que en este punto se han llevado a cabo misteriosas curaciones. De hecho, en el recinto existe una capilla utilizada única y exclusivamente para las curaciones. El lugar cuenta además con sanitarios, una tienda donde se venden cuarzos y demás piedras que se pueden cargar de energía dentro del Foco Tonal, la tumba de José Sebastián Zamora, y una casa gigantesca de madera (más otras pequeñas) para que jueguen los duendes. De hecho, el personal que trabaja día con día en el lugar afirma que existen hadas y que han sido vistas “jugando” entre los árboles.